viernes, diciembre 02, 2005

La Ley de la gravedad o por qué la mierda siempre cae hacia abajo

Si el otro día pegué una patada a los libros de lógica como bien me recordó Mina, hoy vamos a ver si rompo alguno de física.

Todos hemos oído hablar de la ley de la gravedad. Sí, hombre... esa que dice que "todo cuerpo suspendido en el aire se pega una hostia contra el suelo directamente proporcional a la altura a la que se encuentra". Creo que el tal Newton lo explicó de manera algo más fina con una manzana, pero pal caso viene a ser lo mismo.

Bueno... pues si la trasladamos a la empresa, la obtenemos bajo la forma que indica el título de este post.

Tenemos una empresa cliente que llamaremos A. A es poderosa en su ámbito, lo que viene a significar que tiene pasta en abundancia y no sabe qué hacer con ella. Para ello contrata una aplicación a una empresa que llamaremos B, también lider en su sector y que casualmente ha conseguido convencer a A para que se deje la pasta en una aplicación que va a ser la rehostia. Obviamente, se da la paradoja de que A no tiene muy claro lo que quiere, pero sí lo que no puede dejar de tener la aplicación. B no tiene ni puta idea de lo que quiere A, pero tiene clarísimo que menos que llueva hacia arriba, lo que pida A se puede hacer. Ahí es donde entra C. C es un pequeño equipo de desarrollo a sueldo de B. Son unos mandados que hacen lo que se les manda sin poner pegas de una manera rápida y eficiente. Lo dificil lo hacen rápido, para lo imposible tardan un poco más. A le pone unas fechas de entrega a B. B le pone unas fechas de entrega a C. C simplemente se caga en los muertos de ambos, aprieta los dientes y echa horas. Todo va bien. Se van cumpliendo los plazos. Y C se lo comunica a B. Pero B les comunica que ha habido cambios. A, el cliente , ya no quiere que la aplicación haga lo que tenía que hacer; ahora también tiene que freir huevos, lavar la ropa y planchar camisas. Además, lo quiere tener todo terminado un mes antes de lo previsto. Y a lo que había antes, le quiere cambiar el color, el chásis y 10 o 12 tipos de datos, que le hacen más juego con las paredes del despacho. B no pone objeciones. Si A lo pide, A lo tiene. No hay problema. Y se lo comunica a C. C lo flipa. No sólo ya no cumplen plazos.. es que no llegan ni de coña. No sólo ya no tienen el trabajo medio hecho, es que hay que tirarlo todo a la basura. No sólo les ponen las cosas difíciles, es que no hay quien coño haga eso. Y se lo comunican a B. "Señor, ya le dijimos que para lo imposible tardábamos un poco más... una o dos vidas más". Y ahí es donde entra la ley de la gravedad. B contesta: "No es mi problema. Arreglarosla como podais". La mierda no va hacia arriba, sólo baja.

¿¿Estaba clarísimo o no?? ;-)

[Ahora está sonando: La Cabra Mecanica - Rosa gri - V.A. un tributo a duncan dhu - Cien Gaviotas Donde Iran (3:43)]

2 Comentarios:

At 12/02/2005 8:39 p. m., Blogger Deyector dice...

Peor lo tiene B cuando sí es quien se lleva todas las hostias

  
At 12/07/2005 3:51 p. m., Blogger fridwulfa dice...

Jajajaja. Eso que cuentas me suena, me suena mucho. ¡Mierda trabajo, leñe!

  

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